En las regiones semiáridas, el clima calentará más los suelos
El impacto del cambio climático fue uno de los ejes de unas jornadas nacionales realizadas en Córdoba.
Desde el centro de la provincia de Córdoba hacia el norte, el clima semiárido gobierna el ambiente. La calidad de los suelos y un régimen pluviométrico por debajo de otras regiones del paÃs condicionan a la producción agrÃcola, lo que obliga a un manejo de sintonÃa más fina.
Sin embargo, el mayor desafÃo para las producciones de estos lugares estarÃa por venir. El cambio climático tiene cada vez más protagonismo y comienza a hacer mella sobre los hábitat.
El impacto que tiene el aumento de la temperatura en el planeta sumado a la necesidad de gestionar el agua fueron dos de los focos sobre los cuales se desarrollaron las Cuartas Jornadas Nacionales de Suelos de Ambientes Semiáridos. Organizada por la Asociación Argentina de la Ciencia del Suelo y la Facultad de Ciencias Agropecuarias (FCA-UNC) se desarrollaron entre el miércoles y ayer en el auditorio de la Facultad de OdontologÃa, en la ciudad Universitaria.
"El aumento de los niveles de anhÃdrido carbónico (CO2) está elevando la temperatura con el efecto que ello acarrea para la producción", indicó Roberto Izaurralde, investigador y docente de la Universidad de Maryland, durante su conferencia plenaria en el arranque de la jornada.
Para Izaurralde, quien es egresado de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC, el incremento de la temperatura impactará sobre los rendimientos de los cultivos y en la forma de hacer agricultura.
Evolución
Apoyado en la clasificación climática realizada por Köppen y Geiger, y a partir de modelos de simulación, Izaurralde mostró como entre 2017 y el año 2100 habrá un cambio en la conformación de los ambientes semiáridos del paÃs. "Aumentará la región semiárida cálida y disminuirá la región semiárida templada", indicó el especialista.
Este mayor calentamiento del ambiente impactará en forma directa en los rendimientos de los granos.
"La producción global de trigo podrÃa caer un seis por ciento por cada grado centÃgrado de incremento de temperatura", dimensionó Izaurralde.
Una estrategia que apunte a identificar los suelos por su aptitud agrÃcola y direccionar las producciones en función de las capacidades serÃa parte de la estrategia para mitigar los efectos del cambio climático.
Para Izaurralde, las estrategias y tácticas para el manejo sustentable de los suelos en ambientes semiáridos con cambio climático deben incluir el diseño de sistemas integrados de producción, tanto a nivel de cuenca como de establecimiento. "Hay que adaptar sistemas de cultivos por productividad y resiliencia, con la inclusión de cultivos de coberturas y cultivos perennes; además del manejo de nutrientes", destacó el investigador.
La incorporación de criterios de biodiversidad en el diseño de manejos sustentables es también parte de las recetas que deberán aplicar los ambientes semiáridos.