Será 14% más caro importar bienes de capital

La presidenta Cristina Kirchner anunció que se elevará al 14% el arancel de importación para los bienes de capital que se fabriquen en el país, y al 2% para aquellos que no se produzcan localmente. Asimismo, prorrogó el bono fiscal del 14% que reciben los industriales nacionales (que puede computarse para el pago de otros impuestos) hasta el 31 de diciembre.

Sin embargo, lo que se presentó como una "medida de política activa industrial", instrumentada porque resulta "imperioso sostener las políticas fuertemente contracíclicas y acentuarlas", dadas las circunstancias "no de la Argentina, sino del mundo", es en realidad la restitución del arancel externo común (AEC) del Mercosur -del 14% para estos productos- que la Argentina abandonó en 2001.

De hecho, Brasil, Uruguay y Paraguay le permitieron a la Argentina, por más de 10 años, incumplir con la política arancelaria del bloque: desde abril de 2001, el país importa bienes de capital de terceros países (extra zona) con arancel cero, mientras que sus socios lo hacen al 14%, tal como lo establece el AEC, acordado por los cuatro países en los tratados que dieron origen al bloque.

Es el Mercosur el que fija de común acuerdo la política arancelaria para las importaciones. Es también el bloque el que autoriza una reducción parcial o una excepción. De hecho, a principios de 2001, el entonces ministro de Economía, Domingo Cavallo, había eliminado de hecho los aranceles de productos de telecomunicaciones y bienes de capital, lo que motivó una reunión de urgencia en los máximos organismos del Mercosur.

Aun así, en abril de ese año, por medio de la decisión 1/01, el Consejo del Mercado Común concedió las reducciones arancelarias que la Argentina había aplicado de hecho (con las resoluciones 8 y 27 del Ministerio de Economía). Entonces, un Brasil deseoso de proteger su industria nacional con los máximos aranceles (y con una devaluación decidida dos años antes), cedía ante una Argentina que enfrentaba una seria crisis económica y pedía "licencia" para no cumplir con el AEC.

Pero el waiver que el Mercosur le dio a la Argentina tenía un "carácter excepcional y temporario". No obstante, los distintos gobiernos locales lograron prorrogarlo anualmente y por más de 10 años, con el argumento de la emergencia económica. Y persistió el reclamo (y la concesión) aun durante el "máximo período de crecimiento sostenido que tuvo el país", tal como el Gobierno suele calificar la gestión desde 2003.

"A fines de 2011, cuando la Argentina reclamó la prórroga por otro año, Brasil se opuso y le dio seis meses de plazo para volver al AEC", dijo a LA NACION Alejandro Perotti, ex funcionario del Mercosur y especialista en derecho aduanero.

En tanto, la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra) y la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (Apyme) destacaron los anuncios del Gobierno, entre ellos, la prórroga del bono fiscal, que abarca a sectores como el de maquinaria agrícola, equipos de elevación y manipuleo, motores, elevadores, transformadores eléctricos, estructuras metálicas, maquinaria en general, acoplados y remolques, entre otros. En 2011, representó un monto de 1420 millones de pesos. Los beneficiarios deberán mantener los niveles de empleo y sus precios.

"Una vez más, se manifiesta claramente la decisión política de sostener el proceso de industrialización que se inició en Argentina a partir de 2003", manifestó Juan Carlos Lascurain, presidente de Adimra.