Lavalle consolida su identidad vitivinÃcola con vinos caseros y artesanales de sello propio
Con el apoyo del INTA y una fuerte articulación institucional, productores del norte mendocino impulsan un modelo de desarrollo local basado en la calidad, la tradición y la innovación.
"Desde el INTA venimos trabajando desde los inicios con la Asociación de vinos caseros. A lo largo del tiempo, distintos profesionales de investigación y extensión participaron aportando saberes y acompañando los procesos de innovación tanto en el viñedo como en la bodega", explicó Mariana DÃaz ValentÃn, técnica de la AER Lavalle.
Gracias a esta sinergia interinstitucional, fue posible abordar desafÃos técnicos, productivos y comerciales, brindando herramientas concretas a pequeños productores que decidieron dar un paso más y elaborar sus propios vinos. AsÃ, Lavalle fue construyendo un ecosistema vitivinÃcola dinámico y diverso, en el que conviven tradición, identidad territorial y nuevas formas de agregar valor.
Actualmente, el INTA continúa trabajando codo a codo con la Asociación a través de capacitaciones, asesoramiento técnico y participación en eventos claves como el concurso anual de vinos caseros y el seminario regional, que funcionan como espacios de aprendizaje colectivo y de fortalecimiento de la red local.
"El reconocimiento de Lavalle como una zona de vinos jóvenes, con perfil artesanal y sello propio, es fruto de un trabajo sostenido en el tiempo. Es el resultado de entrelazar investigación, extensión y el compromiso de una comunidad productiva que apuesta por la calidad y por una forma distinta de hacer vino", concluyó DÃaz ValentÃn.
En un contexto donde las economÃas regionales buscan nuevos caminos para diferenciarse, Lavalle emerge como un ejemplo de desarrollo local basado en la cooperación, la valorización del conocimiento y la identidad cultural del territorio.