Nueva presión por la yerba mateLa Presidenta amenazó con permitir la importación; Moreno anunció un acuerdo con dos empresas del sector.
La polémica por los faltantes y la suba de precios de la yerba mate en las góndolas, que el Gobierno se encargó de transformar casi en una causa nacional, sumó ayer otro capítulo: en el mismo momento en que anunció la intervención de YPF, la presidenta Cristina Kirchner amenazó con abrir la importación si no bajaban los precios, que ya rondan los 20 pesos el kilo. "Si no acomodan el precio vamos a autorizar que importen para que la gente tome mate como corresponde", señaló la mandataria, que le pidió al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, que "arregle" este tema durante la semana.
Después de esa embestida presidencial, Las Marías y Molinos Río de la Plata, dos empresas referentes del sector, anunciaron, según informó la agencia oficial Télam, un listado con nuevos precios acordados con Comercio Interior. Por Las Marías, Taragüí costará 14 pesos, en tanto Molinos Río de la Plata pondrá a 13 pesos el kilo de Nobleza Gaucha y $ 14 el de Cruz de Malta.
Al margen de los acuerdos de esas empresas con Moreno, desde el sector industrial advierten dos cosas. Primero, que el Gobierno no lograría el efecto que busca si recurre a la importación. Segundo, que el sector está perdiendo alrededor de 4 pesos por cada kilo vendido a salida del molino desde que el Ministerio de Agricultura autorizó una suba del 89% de la hoja verde (de 90 centavos a 1,70 pesos el kilo) y del 109% (de 3,30 a 6,90 pesos el kilo) para la yerba canchada (ya secada).
"La Argentina es el principal productor y luego están Paraguay y Brasil, que se abastecen con su propia yerba y no tendrían capacidad para exportar. Lo que pueda llegar de otros países no va a tener peso [en el mercado]", dijo a LA NACION Julio Blanco, gerente de la Federación de Molineros de Yerba, sobre la alternaiva de la importación. En realidad, ya viene yerba del exterior sin ninguna restricción, pero es muy poco lo que se vende aquí. En 2011 fueron 196 toneladas (de Uruguay vienen marcas como Sara y Canarias), una cifra ínfima frente a las más de 120.000 toneladas de yerba seca que se destinaron para el mercado interno, según datos de varias fuentes privadas.
Para Blanco, una eventual mayor importación "no va a incidir" sobre el mercado interno.
Contra esta opinión, ayer, desde el sector productor algunas voces avalaban que el Gobierno eventualmente tomara también otras medidas que dejó trascender, como cerrar las exportaciones [representan 35.000 toneladas, el 15% de la producción nacional de hoja verde] y aplicar la ley de abastecimiento.
"No consideramos que sean necesarias, pero son las herramientas del Estado para aplicar si hay desabastecimiento", señaló Carlos Ortt, uno de los representantes de la producción en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM).
Pérdidas
Mientras tanto, Blanco dijo que hoy la industria está perdiendo plata por cada kilo vendido a salida de fábrica. De acuerdo con el gerente de la Federación de Molineros de Yerba, antes de la suba que autorizó Agricultura para la materia prima, el sector compraba la yerba canchada a 3,30 pesos y vendía a salida del molino a 6,80 pesos.
Ahora tienen que adquirir la yerba canchada a 6,90 pesos el kilo, pero deben seguir despachando su producto a 6,80. De entrada tienen que comercializar a 10 centavos menos del valor que compran.
"El costo [total, incluidas la compra de la materia prima, su estacionamiento, molienda, mezcla y envase] se va a 12/13 pesos; hoy con el precio a salida del molino a 6,80 pesos [fijado por Moreno] se pierde 4,10 pesos", contó. "Necesitamos que alguien se dé cuenta de esto y de que así la industria es inviable. Pretendemos que el precio a salida del molino tenga una rentabilidad; debería estar en 12/14 pesos", agregó.
Pese a las críticas por los faltantes, Blanco subrayó que el sector industrial estaba despachando normalmente mercadería. "Entregamos con los precios anteriores, perdiendo 4,10 pesos", indicó.
Para el representante industrial, tampoco tendría efecto un cierre de las exportaciones porque vienen en baja. Siria, que el año pasado adquirió 23.141 toneladas [en total, la Argentina vendió 35.428 toneladas a más de una docena de países], frenó sus compras por el conflicto político interno que vive por estos días. De hecho, en los primeros dos meses de 2012 sus importaciones descendieron 14,7%. "Las exportaciones ya están frenadas por lo de Siria", dijo Blanco.
Más allá de la pelea por el precio, persiste otra: es la puja interna entre Moreno y el ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, este último autor del aumento de la materia prima. Según diversas fuentes, la demora de Moreno en tomar partido frente a los faltantes y la suba en las góndolas es una especie de pase de factura por permitirse alzas que él no estaba dispuesto a convalidar para los yerbateros.
$ 20
Precio por kilo
Es el valor de la yerba que empezó a registrarse en las góndolas en las últimas semanas.
$ 12
Precio anterior
Es lo que promediaba el paquete de un kilo antes de los incrementos al público.
La polémica por los faltantes y la suba de precios de la yerba mate en las góndolas, que el Gobierno se encargó de transformar casi en una causa nacional, sumó ayer otro capítulo: en el mismo momento en que anunció la intervención de YPF, la presidenta Cristina Kirchner amenazó con abrir la importación si no bajaban los precios, que ya rondan los 20 pesos el kilo. "Si no acomodan el precio vamos a autorizar que importen para que la gente tome mate como corresponde", señaló la mandataria, que le pidió al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, que "arregle" este tema durante la semana.
Después de esa embestida presidencial, Las Marías y Molinos Río de la Plata, dos empresas referentes del sector, anunciaron, según informó la agencia oficial Télam, un listado con nuevos precios acordados con Comercio Interior. Por Las Marías, Taragüí costará 14 pesos, en tanto Molinos Río de la Plata pondrá a 13 pesos el kilo de Nobleza Gaucha y $ 14 el de Cruz de Malta.
Al margen de los acuerdos de esas empresas con Moreno, desde el sector industrial advierten dos cosas. Primero, que el Gobierno no lograría el efecto que busca si recurre a la importación. Segundo, que el sector está perdiendo alrededor de 4 pesos por cada kilo vendido a salida del molino desde que el Ministerio de Agricultura autorizó una suba del 89% de la hoja verde (de 90 centavos a 1,70 pesos el kilo) y del 109% (de 3,30 a 6,90 pesos el kilo) para la yerba canchada (ya secada).
"La Argentina es el principal productor y luego están Paraguay y Brasil, que se abastecen con su propia yerba y no tendrían capacidad para exportar. Lo que pueda llegar de otros países no va a tener peso [en el mercado]", dijo a LA NACION Julio Blanco, gerente de la Federación de Molineros de Yerba, sobre la alternaiva de la importación. En realidad, ya viene yerba del exterior sin ninguna restricción, pero es muy poco lo que se vende aquí. En 2011 fueron 196 toneladas (de Uruguay vienen marcas como Sara y Canarias), una cifra ínfima frente a las más de 120.000 toneladas de yerba seca que se destinaron para el mercado interno, según datos de varias fuentes privadas.
Para Blanco, una eventual mayor importación "no va a incidir" sobre el mercado interno.
Contra esta opinión, ayer, desde el sector productor algunas voces avalaban que el Gobierno eventualmente tomara también otras medidas que dejó trascender, como cerrar las exportaciones [representan 35.000 toneladas, el 15% de la producción nacional de hoja verde] y aplicar la ley de abastecimiento.
"No consideramos que sean necesarias, pero son las herramientas del Estado para aplicar si hay desabastecimiento", señaló Carlos Ortt, uno de los representantes de la producción en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM).
Pérdidas
Mientras tanto, Blanco dijo que hoy la industria está perdiendo plata por cada kilo vendido a salida de fábrica. De acuerdo con el gerente de la Federación de Molineros de Yerba, antes de la suba que autorizó Agricultura para la materia prima, el sector compraba la yerba canchada a 3,30 pesos y vendía a salida del molino a 6,80 pesos.
Ahora tienen que adquirir la yerba canchada a 6,90 pesos el kilo, pero deben seguir despachando su producto a 6,80. De entrada tienen que comercializar a 10 centavos menos del valor que compran.
"El costo [total, incluidas la compra de la materia prima, su estacionamiento, molienda, mezcla y envase] se va a 12/13 pesos; hoy con el precio a salida del molino a 6,80 pesos [fijado por Moreno] se pierde 4,10 pesos", contó. "Necesitamos que alguien se dé cuenta de esto y de que así la industria es inviable. Pretendemos que el precio a salida del molino tenga una rentabilidad; debería estar en 12/14 pesos", agregó.
Pese a las críticas por los faltantes, Blanco subrayó que el sector industrial estaba despachando normalmente mercadería. "Entregamos con los precios anteriores, perdiendo 4,10 pesos", indicó.
Para el representante industrial, tampoco tendría efecto un cierre de las exportaciones porque vienen en baja. Siria, que el año pasado adquirió 23.141 toneladas [en total, la Argentina vendió 35.428 toneladas a más de una docena de países], frenó sus compras por el conflicto político interno que vive por estos días. De hecho, en los primeros dos meses de 2012 sus importaciones descendieron 14,7%. "Las exportaciones ya están frenadas por lo de Siria", dijo Blanco.
Más allá de la pelea por el precio, persiste otra: es la puja interna entre Moreno y el ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, este último autor del aumento de la materia prima. Según diversas fuentes, la demora de Moreno en tomar partido frente a los faltantes y la suba en las góndolas es una especie de pase de factura por permitirse alzas que él no estaba dispuesto a convalidar para los yerbateros.
$ 20
Precio por kilo
Es el valor de la yerba que empezó a registrarse en las góndolas en las últimas semanas.
$ 12
Precio anterior
Es lo que promediaba el paquete de un kilo antes de los incrementos al público.